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Los tres hermanos no contestaron más ante las amenazas de Blanck, en su lugar alzaron sus manos y empezaron a disparar una gran cantidad de proyectiles de energía que explotaron al contacto con el Elegido que a penas le dio tiempo a reaccionar.
Una columna de humo se elevaba desde lo alto de la torre debido a las explosiones de energía mientras los hermanos miraban con satisfacción como habían derrotado al pobre y joven iluso. O eso creían…
Blanck saltó desde la columna de humo sorprendiéndoles y ya preparado en su más que conocida postura de batalla con sus rasgos animales en su máximo esplendor.
-¿Pero qué…?
-¡Graaaaaghhhh!
Blanck se abalanzó a por el más joven de los hermanos, Ignus, y empezó a golpearle repetidamente con la Llave espada ante lo que el oscuro hechicero no le quedó más opción que defenderse con sus brazos los cuales quedaron hechos polvo antes de que sus hermanos reaccionaran a tiempo obligando a Blanck a retroceder.
-Es un animal.
-¿Cómo osáis llamarme animal, grrr? Los únicos animales aquí sois vosotros.
Los rasgos animales de Blanck se acrecentaron aún más mientras la torre seguía vibrando, a cada segundo que pasaba lo hacía a mayor frecuencia, pero ninguno de los hermanos era consciente de ello. La amenaza de Blanck les había nublado el juicio.
-¡Aaaahh!
-Ignus, ¿estás bien?
-Ese maldito engendro me golpeó con esa estúpida arma. ¡Dueleee!
-Ese maldito engendro me golpeó con esa estúpida arma. ¡Dueleee!
-¡Cálmate, imbécil! Solo son unos golpes.
-Pero hermano…
-Sólo es uno, y nosotros tres, no volverá a cogernos desprevenidos.
-Pero ha dicho…
-¡Era un farol, idiota! Sólo quería desconcentrarnos, pero no por mucho… Ya sabéis qué hacer.
-Sí, hermano.
Blanck se volvió a lanzar al ataque sin temor a la reprimenda de los hechiceros, aunque antes de que pudiera llegar a ellos levitaron quedando los tres creando un perfecto triángulo en el aire. Blanck le arrojó la Llave espada al menor, al cual le había cogido tirria, pero el arma fue detenida por un escudo mágico.
-Grrr…
-¡No sabes con quien te enfrentas, estúpido… Ah!
Una llave deslizadora a gran velocidad arroyó al mayor de los hermanos que cayó directo en la torre donde Blanck aprovechó para “batearle” y estamparlo contra el hermano mediano. Era Eryn que había llegado a tiempo con Kuroi. Deshizo la llave deslizador y bajaron al lado de Blanck.
-Justo a tiempo.
-¿Querías quedarte con toda la diversión?
Los hermanos, que se habían reagrupado algo heridos y cabreados vieron que ahora eran empatados en número.
-Hermano, no podemos permitir que invadan la torre.
-¡¿Crees que no lo sé?! Hasta aquí habéis llegado, Elegidos de pacotilla.
-No me ha gustado como ha sonado esa amenaza.
-Preparaos, ¿esto era lo que querías no, Blanck?
-Estoy preparado para todo. ¡Graaagh!
Los hermanos, unidos, empezaron a invocar una gran cantidad de Sincorazón que unieron entre ellos tres creando una enorme criatura de Oscuridad donde ellos eran las cabezas, la criatura disponía de alas y varios brazos con garras.
-¡La leche!
-Esto no es nada comparado a la criatura del desierto.
-Pero ahora son tres.
-Que sean los que quieran, no voy a quedarme de brazos cruzados.
Blanck se impulsó sobre las cuatro “patas” saltando hacia la criatura pero fue rápidamente repelido por una de las garras que le estampó contra una de las columnas de la azotea.
-¡Blanck!
-Estoy bien, grr…
-¡No puedes ir de frente!
-¡Sí que puedo!
Blanck volvió a saltar pero esta vez aprovechó el momento en que la garra le atacó para impulsarse sobre ésta y saltar por encima de las tres “cabezas”.
-¡Desapareced! ¡DESTRUYE MUNDOS!
Blanck agitó la Llave espada con violencia y una poderosa onda de energía cortante atravesó los “cuellos” de la criatura cercenándolas, el corte sin embargo aún siguió su camino y cortó un trozo de torre de forma limpia antes de terminar de disiparse.
Blanck perdió las facciones animales y cayó como mejor pudo sobre la azotea, fue entonces cuando tres risas al unísono se escucharon.
-¿Pensabas que dejaríamos que ese ataque nos diera de lleno?
-Pobre animal iluso.
La criatura volvió a reconstruirse en torno a los cuerpos de los tres hermanos pero esta vez mucho más grande y atemorizante, aunque no tanto como la que su hermano construyó en el desierto.
-¡Mierda! Os dije que no estábamos a la altura.
-Je…
Blanck sonrió satisfecho, las vibraciones hacía tiempo que se habían detenido y eso solo podía significar una cosa.
-¿De qué te ríes? Nos van a barrer.
-Mi oído es una virtud.
-¿Y eso a qué viene?
La criatura de Oscuridad levantó todas sus zarpas a la vez con la intención de barrer a los Elegidos de una vez.
-¡No!
Aunque Kuroi a tiempo se interpuso transformando su Llave espada en escudo y protegiendo a Eryn y a Blanck del golpe que podía haber sido letal.
-¡No son tan fuertes como el otro!
-Pero son más ataques, cuidado.
Las garras se volvieron a alzar y a atacar una y otra vez repetidamente haciendo a los tres retroceder poco a poco hasta que les pusieron al filo de la azotea.
-¡Nos van a tirar! ¡Kuroi, haz algo!
-A penas puedo aguantar el escudo.
El último garrazo iba a hacerles caer con fuerza cuando algo lo partió en dos.
-¡Keiro al rescate!
-¡Chicos!
-¡Keiro, Bastet, justo a tiempo!
-Tú lo sabías, ¿no?
-Puede… Y aún está por llegar lo mejor, pero tenemos que aguantar.
-Kuroi, descansa. Bastet, cuida a Blanck y a Kuroi. Eryn, tú y yo aguantaremos. Blanck, espero que tengas razón.
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Mientras, decenas de pisos más abajo, la princesa se había iluminado como un faro deteniéndose de parpadear. Zero estaba a su lado totalmente sorprendido mientras los rayos de luz que salían de Eleone destruían a los Sincorazón que se acercaban curiosos.
-¡Princesa, detente!
-No… no puedo pararlo, Zero.
-¡Van a venir todos a la vez!
Zero empezó a derribar a los Sincorazón que los rayos de Luz no alcanzaban. Los sincorazón caían a decenas, pero por cada diez que caían aparecían cien.
-¡No sé que hacer, ayúdame!
-¡Mierda!
Zero no sabía qué hacer, parecía como si estuviesen actuando contra reloj, pero no tenía tiempo para pensar abatiendo Sincorazón. Pero entonces el tiempo se acabó y la Luz agarró a Eleone ascendiéndola al aire. Zero se lanzó a agarrarla de un brazo.
-¡Princesa! ¡Princesa!
Pero Eleone había perdido la consciencia.
-¡No te voy a soltar! ¡No te voy a dejar! ¡Princesaaa!
La Luz que emergía de Eleone empezó a bañarlo todo mientras ascendía y Zero se vio obligado a cerrar los ojos mientras una poderosa explosión de Luz combinada entre Eleone y el Corazón del Mundo hizo trizas a todos los Sincorazón. Entonces la torre volvió a empezar a vibrar como un volcán.
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Keiro y Eryn yacían arrodillados y cansados mientras Bastet intentaba mantener a todos conscientes.
-Estáis acabados, Elegidos. Vuestro poder no puede compararse al nuestro.
-Quizá el nuestro no.
Blanck se alzó volviendo a encarar a los hermanos.
-Ya viene…
La torre empezó a vibrar con fuerza sacudiéndolo todo, los Elegidos parecían sorprendidos y asustados cuando Blanck los fue cogiendo uno a uno con sus últimas fuerzas y los alejaba del centro de la torre.
-Blanck…
Sin embargo, el Elegido cayó inconsciente.
-¿Por qué ha hecho eso?
-Yo me preocuparía más por las vibraciones, parece como si la torre se viniese abajo.
-¡Hermano, ¿qué le pasa a nuestra torre?!
-¡No lo sé!
Las vibraciones llegaron a su culmen cuando una poderosa columna de luz emergió de dentro de la torre abrasando a los Sincorazón que hacían de sustento a los hermanos y por el agujero causado por la columna de luz, ascendió la princesa Eleone iluminada con Zero a cuestas inconsciente.
-¡Pri-princesa!
-¡¿Quién es esa?!
Los hermanos se vieron obligados a bajar de nuevo a tierra donde alucinados miraban a aquel avatar de luz que les quemaba con solo mirarla.
-Hermano, es… es tan fuerte…
-¡Aguantad, idiotas!
-Me habéis traicionado.
-¡¿Cómo dices, niña?! ¡Ni siquiera te conocemos!
-Me encerrastéis y apagastéis mi Luz con su Oscuridad.
-¿Qué dice?
-Eleone parece diferente.
-No es ella…
-¿Cómo que no es ella?
-Vosotros érais parte de mí. Yo os di la vida. Y vosotros me habéis traicionado.
-No puede ser…
-¿Qué pasa hermano?
-Esa chica es… ¡No puede ser!
El hermano mayor lanzó un poderoso rayo de oscuridad a Eleone pero a medida que chocaba contra su cuerpo protegido por la luz se iba disipando.
-Y ahora me atacáis a traición. No merecéis vuestros Corazones.
Eleone alzó la mano y como si de una aspiradora se tratase empezó a absorber los pechos de los hermanos de los cuales salieron sus oscuros y deprimentes corazones que desaparecieron tras una puerta de Luz. Cuando la puerta se cerró, Eleone perdió las fuerzas y cayó, aunque justo Zero recuperó la consciencia y saltando la dejó caer en suelo firme.
-¿Qué coño ha sido eso?
-No lo sé. Princesa, respóndeme…
-El avatar de la Luz.
-¿El avatar de qué…? ¿De qué hablas, Blanck?
-Ella es el avatar de la Luz.
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